Publicado en Revista Contratiempo (Mayo 2010)
“El arte es un mundo de ideas, obtenidas de la vida o de la imaginación, de alguna escena cinematográfica o de un simple párrafo en un libro; duermo y despierto pensando en arte”, Marcos Raya.
Hace 7 años atrás en nuestra primera edición de Contratiempo, llevamos a Marcos Raya: de lo histérico a lo lúcido, destacando su obra en toda la edición. Ahora, en nuestra edición 75, volaremos a ciegas junto con él, al Instituto Cultural Cabañas en Guadalajara, México, donde presentará una retrospectiva de su obra del 14 de Mayo al 30 de Junio, como parte de las celebraciones del Festival de Mayo y al bicentenario de la fundación del Hospicio Cabañas.
Marcos Raya originario de Irapuato, Guanajuato mostrará al pueblo mexicano 60 obras post-modernistas que incluyen: pinturas, instalaciones, técnicas mixtas, collages Y fotografía. Obras que reflejan la fusión de dos culturas; de niño, Raya llegó a Estados Unidos, con la visión de un mundo mágico (Irapuato) de fiestas, celebraciones, tradiciones, música y colores, y de repente se enfrenta, en palabras del autor, “ante una ciudad industrializa, como Chicago, donde en lugar de ver humanos, veo robots incluyendo a mi propia madre”.
TENDENCIAS
Su regreso a México durante los 60’s, hace que Raya tenga un acercamiento con un muralismo y tome conciencia política; New York junto con Marcel Duchamp marcan sus fragmentos surrealistas y dadaístas; finalmente la experiencia de haber vivido en el primer barrio mexicano en Chicago, desde sus inicios, y haber sido parte de los movimientos chicanos de los 70’s concluyen su carácter y estilo. Por lo tanto, el resultado de su trabajo es un arte critico, comprometido y consiente de los individuos en la sociedad, estructurado con un balance capitalista “pobre/rico, vida/muerte”.
Su arte mural ha plasmado manifiestos políticos y lucha de clases; Raya pinta a Zapata en “Caminaremos bajo las ruinas del Facismo”, realiza un “Homenaje a Diego Rivera” en 1968 de “Man at the Crossroads”, sin olvidar que rehace la fachada de Casa Aztlán en 1975, ilustrada con diferentes personajes y líderes históricos.
Por otro lado, su arte en estudio delibera fantasías, fanatismos, imágenes y objetos rascuaches; juega con un humor futurista donde la tecnología puede ayudar a la humanidad o destruirla. Raya denuncia y critica sarcásticamente problemáticas actuales, tal como: en la instalación “Getting over the phobia against malicious clowns” marca el momento en el que Bush invade Irak, reflejado como un payaso gastando el presupuesto en maquinaria velica. Dentro de su conformidad hacia la tecnología y su fetichismo “hacia la belleza natural en la forma de las nalgas de la mujer” como lo describe el artista, podemos observar “Girl with Prosthesis #1” en la cual una chica con una figura espectacular por detrás posee una pierna robótica que la mantiene de pie.
El arte de Marcos Raya siempre había sido del gusto de coleccionistas judíos en su mayoría, hoy en día más jóvenes latinos se están interesando en su obra y es así como llega al Hospicio Cabañas; con un arte de estudio vanguardista difícil de entender dentro de nuestra comunidad latina, pero aun así reconocido como uno de los mejores artistas que habitan dentro de la comunidad de Pilsen.